UNIVERSIDAD JUÁREZ AUTÓNOMA DE TABASCO

Sinceramente no sabía nada del aprender a aprender por competencias, sin embargo consideraba que era una estrategia implementada para facilitar el fácil conocimiento en el alumnado como su nombre lo dice por competencias.
        Ahora, que estoy en la recta final del primer ciclo de Contaduría cada una de las asignaturas se encargan de desarrollar la aptitudes básicas solicitadas en cualquier área profesional y por lo tanto, si son importantes aunque muchas veces para nosotros como estudiantes es algo que pasa por desapercibido.

Mi aprendizaje se vio muy desarrollado principalmente cuando era de manera presencial,  cada actividad realizada en el aula siendo guiado por el docente fue para adquirir conocimientos y ser capaces de poder realizar actividades similares por nuestra cuenta.
        Sin embargo, las actividades a distancia tales como los reportes de lectura, de vídeo, las actividades integradores también fueron muy útiles pues en particular me ayudo a diferenciar entre las páginas confiable y las que no también a hacer uso del material didáctico dado por el profesor así como mejorar el uso de una laptop y los distintos sitios de trabajo como Word, PowerPoint, etc.

En torno a las competencias en último momento me di cuenta que cada asignatura que para mi y muchos más no tenía sentido al final si lo tenía y no solo eran de relleno como muchas veces decimos pues sin estas no podríamos fomentar principalmente las competencias genéricas.
        En la asignatura de Contabilidad creo que fue en la que más empeño puse al tratar de comprender las NIF para realizar estados financieros, pero aún así la práctica es algo primordial para fomentar y desarrollar aún más estos aprendizajes. Al final cada autoevaluación era una reflexión profunda sobre cómo fue mi rendimiento en cada parcial y me tomaba la tarea de reflexionar en los puntos donde falle para mejorar en un futuro.
        Desde mi perspectiva, el aprendizaje por competencias emerge como una herramienta eficaz que nos permite, como estudiantes, adquirir habilidades prácticas y aplicar nuestros conocimientos en contextos complejos. Este enfoque nos capacita para abordar problemas de manera efectiva y emplear métodos que trasciendan la teoría, llevando así el aprendizaje más allá de los fines académicos.

        En el caso de las competencias genéricas se revelan como bases fundamentales en cualquier área profesional. La capacidad de comunicación, tanto oral como escrita, junto con la habilidad de analizar y sintetizar información, promueven un pensamiento crítico y creativo. Asimismo, el trabajo en equipo y el uso hábil de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) se rigen como puntos esenciales para desenvolverse en el entorno laboral actual.

        Por otro lado, al centrarnos en las competencias específicas de la asignatura, nos sumergimos en la aplicación práctica de normativas como las Normas de Información Financiera. La habilidad para emitir estados financieros en conformidad con la legislación vigente se convierte en un componente crucial para enfrentar los desafíos del mundo contable.

        Ambas dimensiones, las competencias genéricas y específicas, se entrelazan para conformar un aprendizaje integral.         Este enfoque no solo fortalece nuestras capacidades, sino que también nos brinda la oportunidad de descubrir habilidades de las que somos inconscientes a lo largo de nuestra trayectoria educativa. El aprendizaje por competencias no solo nos prepara para el presente, sino que nos dota de las herramientas necesarias para afrontar con éxito los retos futuros, consolidando así un proceso formativo en constante desarrollo.

Por último, después de todas las travesías presentadas considero que de cierta forma mejore mucho en las competencias genéricas y específicas, sin embargo, aún me hace falta mucho por mejorar como el uso del pensamiento crítico y la comunicación principalmente y en reforzar el uso de las NIF para elaborar estados financieros.